Mor
Y las estúpidas parcas lo habían logrado… No podía dormir.
Nos turnábamos para las guardias, ya que estábamos en alta mar, territorio de Poseidón y por consiguiente, totalmente a la deriva de sus caprichos.
El barco estaba serio y sombrío, como en un luto silencioso. Patroclo hablaba solo cuando era requerido, el resto estaba meditabundo, conversando acerca del rumbo y lo extraño que había sido la muerte de Demtrius. Extraña, pero al parecer sin solución alguna aparentemente.
Yo, por mi parte, sencillamente no dije nada, no comenté nada, no hacía nada sospechoso, solo vigilaba.
Mis ojos se clavaban en el mar, mientras sentado en la parte más alta de la embarcación observaba, hasta llegué a tomar dos turno seguidos, pues tenía insomnio, estaba aburrido, y con todo esas palabras no podía hacer más que pensar.
Baje la mirada levemente al escuchar el curso del barco. Y es que no era necesario que estuviese allí ¿Para que? Si el mapa ahora era el que decidía a dónde íbamos. Subí la vista y volví a mirar el mar. Me pareció ver algo brillante y de un color grisáceo, como un pescado de grandes dimensiones, pasando de largo rápidamente bajo nuestro haciendo un ligero chapaleo. Me levanté estrepitosamente.
Todas las miradas se clavaron en mí repentinamente, pues había estado casi inmutable, sentado y de pronto me movía tan rápido. Creo que hasta más de uno se preguntó a que se debía el milagro. Pero no era nada. No, lo más probable que había sido un pescado, eso quería pensar.
-Creo que paso un pez… por debajo del barco…- comenté. Cyrene me tiró algo regañándome por qué le había asustado, le esquive sin problema, varios dieron un gran suspiro y Dinethos frunció el ceño, había entendido a que iba.
Me volví a sentar… Todos seguían con sus actividades, varios dormían. Comencé a mirar a cada uno, pensando. ¿Que habrían querido decir las parcas?
De pronto unos movimientos, me giré era Dinethos.
- En la noche nadie pesca porque los peces están durmiendo…- comentó mientras se sentaba y miraba también.
- Exacto… por eso que hay que estar alerta- le respondí sin mirarlo.
- ¿Siempre eres tan apartado y callado?- preguntó mientras sacaba algo de su bolsillo, un instrumento, al parecer para mira de lejos y comenzó a mirar el horizonte.
- ¿Y tú eres así de preguntón cuando estas en alta mar, siempre?- le respondí mirándole brevemente y volver a mirar el mar.
El chico rió.
Cruce mis brazos y piernas y me recosté más en el madero.
-Mor… ¿Te llamas Mor no?- pregunto. Yo le miré bufando con cierto fastidio.
- Tienes que ver esto…- pasándome el objeto. Miré a través de él y pude observar una barca. Un brazo colgaba de él.
Cuando fui a entregárselo ya Dinethos no estaba, pues estaba contándoles a todos lo visto.
Volví a mirar y el brazo ya no estaba…
Al parecer estaba vivo.
-Hay que acercarnos- comentó Heracles.
Yo seguía mirando… En caso de que la cosa no fuera tan indefensa como parecía.
El barco comenzó a acercarse, y todos se acercaron a ver que era, quien era.
Yo me giré de donde estaba, expectante, de vez en cuando mirando hacia otros lados a ver si esto no era una trampa.
- Súbanla cuando alce los brazos- gritó Heracles, mientras descendía hasta el pequeño barco y se escuchaba un sonido sordo en su suelo.
Yo no me moví de mi puesto. No, ya eran demasiados allí.
Un esfuerzo por parte de Adelphos, Dinethos y Zorba y subieron a lo que al parecer resultaba una chica, seguido de Heracles… Calisto y Zorba corrieron a auxiliarle.
-Al parecer ha estado demasiado tiempo al sol, esta como deshidratada- decía Zorba mientras comprobaba su estado.
- Agua- pidió Calisto y ya todo se había vuelto un alborozo con gente corriendo de un lado a otro.
Un par de minutos más y la chica desapareció, se la llevaron a uno de los camarotes en la parte de abajo. Yo sencillamente volví a cruzarme de brazos y piernas y seguir vigilando. Mientras se escuchaba el alborozo.
De pronto alguien subió y se sentó al lado mío.
- Pareces una estatua… ¿Vas a tomar otro turno?- comentó.
- Lo más probable…- respondí, mientras seguía mirando.
by Double_Angy