15.10.11

Cap 197

Epifanía

El arma era muy pesada, increíblemente pesada y parecía ser que ahora estaba siendo aún más pesada. La levanté y la dejé caer contra la masa negra que me cerraba el paso, la porquería se cortaba y luego volvía a unirse, para moverse y acercarse a mis pies. Entonces sentí una voz llamándome desde un árbol, observé hacia arriba y ahí, un Zorba con rostro de inframundo me extendía los brazos. Me ayudó entonces a subir al árbol, un árbol forrado y enorme.

-Estoy superada... No puedo hacer nada desde aquí -negué mientras observaba como la masa negra se volvía y buscaba otro blanco.
-Quédate aquí entonces, sé que no tienes arma –comentó el joven.
-Pero no puedo, tengo que hacer algo –aseguré intranquila.
-Morir no ayuda mucho -lo observé y asentí, entonces ocurrió lo peor...

Cyrene fue alcanzada por la masa negra. -¡Pos Zeus! ¿Qué hago, que hago?- pensaba frenética.

-¡Tengo que irme! –exclamé.
-¿Qué? No, está lleno de cadáver de vaca... No puedes bajar –la voz del joven denotaba preocupación.
-Pero tengo que hacerlo –aseguré.
-¿Y cómo? -lo pensé un segundo y entonces lo observé.
-Ayúdame –le pedí.
-Pero tengo que ir contra Apolo – respondió negando, entonces lo agarré de los hombros bruscamente -Por Zeus, Epifanía que bruta- pensaba ante la mirada que Zorba me devolvió.
-¡Cyrene está herida! Tienes que ayudarme.
-Epifanía... El grupo está...
-El grupo está desorganizado, están luchando y Apolo está pendiente de ellos... No nos notará. Por favor... –dije lo último con un hilo de voz, temiendo que no me ayudase.
-Bien... Pero tenemos que ir por los árboles, el suelo está lleno de los cadáveres.
-Bien.

Recorrimos las ramas pendientes de la masa negra que carcomía los troncos para bajarnos. Mientras los hombres luchaban, Apolo se armaba y desarmaba, y fue entonces que llegamos al lugar en que Cyrene continuaba luchando contra las masas negras.

-Es una quemadura ¡Cyrene quédate quieta! –exclamó Zorba.
-Pero el arco –decía ella.
-¡Dámelo! -musité y la chica me lanzó el arco y las flechas y comencé a lanzarlas contra la masa negra para protegernos mientras Zorba ayudaba a Cyrene a subir al árbol.
-¡Epifanía! –dijo el médico una vez arriba.
-¡Espérame! –dije adrenalínica por el momento.
-¡Sube ahora! -me gritó la muchacha, me giré un tanto cohibida por su grito y asentí, y con la ayuda del doctor, me encaramé en la gruesa rama del árbol.
-Es una quemadura muy fuerte, tienes que refrescarlo... –hablaba Zorba en dirección a Cyrene. Entonces recordé.
-¡Tengo medicina! -dije mientras entregaba el arco a Cyrene y buscaba entre mis cosas la concha marina.
-Te lo aplicaré, pero es fundamental que después lo sigamos refrescando... ¿Te duele al pisar?... –continuó el médico.

Y mientras Zorba ayudaba a Cyrene yo observaba la batalla... Apolo sí que era un dios formidable y... Temperamental. Entonces la batalla se transformó en un uno a uno contra Mor, y a pesar de todo, este se mostraba tan descuidado y tranquilo contra el dios...

-Necesitan ayuda -musité, Zorba me observó mientras vendaba el tobillo de Cyrene con parte de su vestido rasgado -Zorba, tienes que ir... Yo ayudaré a Cyrene a que continué con su arco.
-Traten de no bajar -musitó observándonos con preocupación.
-No lo haremos -mentí... Porque si tenía que bajar, lo haría.
-Epifanía... –habló Cyrene, notándome reflexiva en aquel instante.
-Vamos Cyrene -musité ayudándole a levantarse -Vamos, que Apolo podría acabar contra ellos uno a uno...


By KatrinaxSteves