28.6.10

Cap 04

Heracles 

Isla de Creta~

Las ropas que había comprado en una de las tiendas de Creta era muy cómodas, ideales para protegerse del frió, del abrasante sol y para poder luchar más ágilmente. Eran casi perfectas... En fin, el camino por el que transitaba ahora estaba rodeado por altos árboles que dejaban pasar apenas la luz del sol, una leve brisa se levantaba moviendo apenas mis cabellos. Cerré los ojos un momento, recordando a mi familia... ¿Porque rayos tuvieron que morir? ¿¡Por qué!? Definitivamente los dioses lo pagarían caro, se metieron con lo que más anhelaba en este mundo, ahora ya no tengo nada que perder.

Llegue a una encrucijada, tenía tres caminos para escoger... Saque mi espada, ella me había guiado hasta aquí, y no bromeaba... En realidad creía que esta espada era especial. Volví a cerrar los ojos, esta vez la espada se impulsó apenas hacia la derecha de donde estaba, mire hacia allí... Sin dudarlo guarde mi espada y empecé a caminar hacia allí, acomodando el escudo que colgaba en mi espalda y sacando el cuero con agua bebiendo unos cuantos tragos para seguir camino y ya no detenerme. En realidad no conocía lo que quería la espada, me había guiado hasta aquí, pero no sabía que me encontraría... ¿Aliado tal vez? Ya lo vería. Debía aceptar que necesitaba gente para emprender mi partida... De repente el cielo se puso rojizo y un carruaje de oro apareció en los cielos dando un mensaje... Lo escuche con atención, una vez que termine de oírlo me había decidido a encontrar a ese sujeto, el como lo haría era más difícil ya... Pero no me detendría ahora, debía confiar en mi espada.

Una Hora Después~

Caminando sin detenerme logre llegar hasta el punto que mi espada me había indicado. Fruncí el ceño apenas, ahora debía ver que hacer. Ya había llegado hasta cierto punto, era momento de... Mire a un lado, había una tienda donde vendían algunas cosas para comer, en verdad no había comido hacia días ya que recuerdo. Me dirigí hacia allí gastando algunas monedas pero quedando satisfecho al fin y al cabo. Lo que me quedaba ahora era caminar en busca de ese sujeto, ¿la espada me habrá indicado que estaba aquí? Vaya, creo que debo dejar de seguir en todo a mi espada...

Empecé a caminar sin destino fijo, hasta que recordé que estas tierras eran dominio de Minos... La única forma de salir de la isla era mediante el barco que le pertenecía a este, posiblemente... Muy posiblemente estarían cerca de allí. Cuando pretendía empezar a caminar hacia allí, un grito o mejor dicho un chillido me hizo girarme, allí había un hombre completamente encapuchado que tenía un águila en su brazo, me hacía señas con la otra mano para que me acercara. Dude un momento, pero de paso le preguntaría donde quedaba el lugar que buscaba...

-Ola Heracles...- dijo este, podía ver entre las penumbras parte de su rostro, y no era muy agradable.
-¿Cómo sabes mi nombre?- le pregunte serio...
-Solo lo sé... Y también sé que pretendes hacer, necesitaras ayuda en tu camino Heracles, luchar contra los dioses no será tarea fácil... Para nada...-
-¿Quién eres extraño?-
-Eso... Solo un extraño... Toma Heracles, Midhos te ayudara en tu viaje...- dijo mientras su ave volaba hasta pararse en mi brazo, me sobresalte un poco pero cuando note que el ave no me intentaría morderme o algo así me volví al sujeto, pero ya no estaba allí....
-¿Extraño?- pregunte tratando de ubicarle, pero me fue imposible... Mire al águila, sus plumas eran raras, un leve tono dorado las cubría, además al tocarlas note que eran duras... Filosas... -¿Con que Midhos eh?- le dije, el ave chillo apenas mientras empezaba a caminar.

Ya que no le pude preguntar a el sujeto extraño, le pregunte a la próxima persona que se cruzó en mi camino. De esta manera acompañado de Midhos llegue a este lugar, me llamo la atención tres sujetos hablando. Abrí los ojos cuando descubrí que era al que buscaba... Empecé a seguirlos prudentemente, hasta que decidí aparecérmeles.

-¿Quién eres?- me pregunto al que llamaban Adelphos, este ya había sacado su espada apuntándome.
-Soy Heracles...- le dije calmado mientras que Midhos chillaba mirando a la chica, esta miraba al ave con interés. -Vengo de muy lejos con la intención de destruir a los dioses, pero parece que alguien más se me adelanto y de forma formal...-
-Con que también quieres acabar con los dioses...- dijo Adelphos, bajo su espada...- Entonces bienvenido Heracles, ellos son Epifanía...- dijo señalando a la chica, asentí con la cabeza -Y él es Keops- hice lo mismo.
-¿Y de dónde vienes?- pregunto el chico...
-Tebas- respondí rápidamente
-¿Tebas? Interesante...- dijo el chico, fruncí apenas el ceño pero después me dirigí a Adelphos...
-¿Cuál es tu plan?- le pregunte, mientras Midhos se movía un poco de mi brazo. Me caía bien el ave...
-Intentaremos conseguir un barco...- me respondió este, asentí con la cabeza y seguimos caminando.

By Silius